Aire del sur sofisticado: MªÁngeles

MªÁngeles y Carlos son de Brunete, se conocen desde niños, aunque su relación comienza bastantes años atrás en un día muy castizo, 15 de agosto, cuando en plena fiesta de La Paloma se animaron por fin a declararse prometiendo no separarse jamás. Dos años más tarde, el 16 de abril, día del cumpleaños de ella y en Toledo, Carlos le pidió matrimonio, 365 días después, se convertirían en marido y mujer.

La primera vez que MªÁngeles escuchó mi nombre fue doce años antes, en la boda de su prima a la que tuve el honor de vestir también, desde aquel momento no sabía con quién se casaría, ni dónde ni cómo, pero una cosa tenía clara, confiaría en mí para tan especial encargo, agradezco mucho su fidelidad.

 

He de decir que MªÁngeles al igual que yo es sumamente detallista y minuciosa, su vestido debía ser un fiel reflejo de todo ello. Confeccionado en crepe de seda natural y con una cola espectacular con pequeños volantes de tul bordado y encajes antiguos que conferían al vestido ese aire del sur que buscaba, a la par que romántico y vintage.

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El velo con el encaje haciendo juego acompañaba y realzaba aún más el diseño, rematando un exquisito tocado de Tuca Román en plata con una piedra semipreciosa de cuarzo, cuyo tono es  tendencia y que le inspiró para decantarse por los maravillosos zapatos de Jorge Larrañaga que conjugaban a la perfección con el precioso y delicado ramo elaborado por Verde Pimienta.

 

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Además le propuse hacer una enagua de encaje y muselina en la misma línea con un toque seductor, todo un acierto. El resultado fue un vestido de alta costura sumamente elegante pero muy airoso y especial.

 

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Del maquillaje se encargó Carmen LLosa y para el peinado confió en su peluquera de toda la vida, Mercedes Muñoz. Las joyas que lució la novia eran de Suárez, cabe hacer una mención especial a la pulsera que llevó MªÁngeles, la misma que también acompañó a su madre el día de su boda y que fue un regalo de los padres de ésta en la mayoría de edad, pienso que no pudo llevar mejor talismán :-).

 

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Aquel día amaneció lluvioso pero nada pudo nublar la felicidad de los novios. MªÁngeles irradió toda la luz que las nubes ocultaban y la boda acontenció como siempre había soñado.

 

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Preciosa foto realizada por  Beatriz Goiri donde se aprecian los detalles de la enagua y falda.

 

La  emotiva ceremonia religiosa se ofició en la Iglesia de Brunete, Nuestra Señora de la Asunción y el precioso Convento de Boadilla fue el escogido para acoger la celebración posterior.

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En el Convento de Boadilla festejándolo.

En el Convento de Boadilla festejándolo.

 

Espero de corazón que el sabio refranero al igual que os pronosticó lluvia en abril prosiga haciendo honor a sus vaticinios ..”novia mojada, novia afortunada”;-) Que en vuestro camino os acompañen muchos días soleados y “los lluviosos” los capéis siempre juntos y de la mano. Un abrazo enorme, sed muy felices.

 

El amor alivia como la luz del sol tras la lluvia“(W. Shakespeare)

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-Fotografía Beatriz Goiri

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