EL IMPRESIONANTE VESTIDO JOYA DE ANABEL

Anabel y Manuel se conocieron una tarde de agosto en las terrazas del centro comercial Arturo Soria plaza. Desde ese momento Manuel sabía que había encontrado a la mujer de su vida y reconoce que conocerla fue, sin duda, su mejor regalo de cumpleaños que había sido dos días antes. Muy poco tiempo después ya había conquistado el corazón de Anabel.

Una noche en casa, que Anabel no sospechaba absolutamente nada, después de la cena iban a tomar de postre su tarta favorita, que la hace la madre de Manuel, pero esta no iba a ser una tarta más. De repente su cara cambió cuando se encontró que dentro había un anillo que estaba buscando a su dueña.

Ya sabéis cuál fue su respuesta inmediata!

Para elegir su vestido de novia Anabel sabía que quería un vestido hecho para ella, de Alta Costura y a medida. Tenía pensado ir a varios talleres de novias pero tuvimos la fortuna que ser el primer atelier que visitó y se quedo con nosotras!!

Como podéis ver, ella no quería “el típico vestido de novia”. Me contó que era lo que buscaba y con lo que se sentía identificada para su gran día y rápidamente empecé a imaginarme un vestido joya para ella. El diseño, aparentemente de líneas sencillas, captaba toda la atención en el fascinante tejido de pedrería de cristal cosido a mano, la abertura de la falda y el impresionante escote de la espalda.

Con cada vestido de novia disfrutamos en el atelier porque cada uno transmite una historia, una personalidad, un estilo y sobretodo mucha ilusión y emoción de cada novia. Nuestro objetivo es que estén enamoradas de su vestido y que cuando se lo pongan no se les borre la sonrisa.

Estas espectaculares sandalias de Jimmy Choo eran el complemento ideal para el modelo de Anabel!

El ramo de novia lo encargó a la floristería Búcaro. En tonos rosas y con una composición muy bonita que le daba un aire romántico al vestido.

Se casaron en la Catedral Castrense de las fuerzas armadas. El padre de Anabel es militar y a ella le hacía una ilusión especial entrar del brazo de su padre en esta Iglesia, vestido de militar.

A las puertas de la Iglesia los recién casados se hicieron las fotos con sus familias. Todos elegantísimos, tal y como la ocasión lo merecía.

A continuación se desplazaron hasta la finca “Casa de oficios”. Después de visitar varias fincas se decantaron por este lugar por su bonito entorno, por el trato tan encantador de sus dueños y porque esta perfectamente acondicionada para cualquier tiempo que les pudiera hacer, pues al casarse en marzo el clima es más variable que en otras épocas.

Carolina de Cartu, fue la responsable de la impresionante decoración y puesta en escena de la finca. Para ello contó con la ayuda de la floristería Búcaro.

Los novios son grandes aficionados a las series, así que decidieron que los nombres de las mesas serían los de sus series favoritas con las imágenes. Una idea muy divertida y que encantó a todos los invitados.

La novia entregó una réplica de su ramo a sus hermanas y a una amiga.

Con el tipazo de la novia y lo espectacular que estaba con su vestido de novia, poco aderezo más necesitaba. Sin embargo nunca hay que olvidar las joyas en un día tan importante. Llevó el anillo de pedida, de zafiro y brillantes, una pulsera de brillantes que le regaló su chico el día de su cumpleaños y unos pendientes de brillantes en cascada que le dejó su madre.

El velo que le iba al vestido “joya” de Anabel era un sencillo tul de seda natural que sujetó con un broche que era de su madre.

El apartado de belleza para el día de su boda se lo encomendó al equipo de Bajobé, con quienes Anabel quedó contentísima y el resultado a la vista esta! guapísima!

Muchas felicidades pareja! os deseo todo lo mejor!

Fotos: Volvoreta