MARTA: UNA NOVIA CON LUZ PROPIA EN ALCÁZAR DE SAN JUAN
Alcázar de San Juan es el pueblo natal de los novios de esta semana, Marta y Miguel Ángel. Allí se conocieron con tan sólo 15 años. En seguida se hicieron grandes amigos y al cabo de un año comenzaron su historia de amor.
Miguel Ángel planeó pedirla matrimonio durante una escapada romántica a Granada . La sorprendió con un anillo metido en una copa de champagne!!! Marta, sin palabras y emocionadísima, no dudó ni un instante en decir “Sí”.
Marta tiene un encanto y una luz especial en su mirada. Según me contó, tenía previstas varias visitas a distintos talleres de Alta Costura en Madrid. Se había imaginado muchas veces su vestido de novia y tenía muy claro que quería un diseño sencillo, con movimiento y con un detalle rompedor.
En cuanto empezamos a hablar capté su idea e hice todo lo que estaba en mi mano para enamorarla con mi propuesta!
El vestido lo confeccionamos en muselina de seda natural con una falda vaporosa con vuelo y cuerpo ajustado y muy limpio para lucir su talle y los bonitos escotes de la novia.
El toque final y rompedor lo dimos con un fajin de pedreria en varios tonos que cobraba mucho protagonismo. Quedaba precioso y muy original.
Para adornar la trenza que llevó Marta, eligió en el atelier una peina de hojas en plata y toques de nácar. Nos encantaba como le sentaba con su recogido y con el velo liso en tul de seda natural.
Un amigo de la novia fue quién diseñó su ramo. Con un colorido muy veraniego y perfecto para ella, su vestido y su tono de piel. Compuesto por peonías, rosas inglesas y craspedias entre otros.
La madre de la novia también confió en nosotras para hacerse el vestido para la boda. Como veis el tipo y el estilazo muchas veces sí se heredan. Y en este caso es evidente. Madre e hija muy guapas y muy elegantes.
No quería dejar pasar los zapatos que lució Marta en su gran día. Un modelo espectacular de Magrit Couture, hechos a medida. Fueron un regalo de dos de las íntimas amigas de la novia. Un gusto exquisito!
Su tía le regaló los pendientes, de diamantes y perlas. El anillo de pedida y una pulsera que le regalaron sus suegros fueron el resto de joyas por las que se decantó.
Tuvieron una increíble tarde de verano con una luz preciosa que iluminaba aún más a la guapísima novia.
Tras un largo noviazgo de 13 años, se casaron el pasado 26 de julio a las 18.00 en la Iglesia Santísima Trinidad de Alcázar de San Juan, que pertenece al colegio donde estudió el novio.
La cena y el baile lo celebraron en la finca de Los Batanes, un lugar próximo al pueblo de los novios y con un significado especial para Marta y su familia ya que ha pasado allí gran parte de su infancia.
No os perdáis ver también con mucho detalle la magnífica e increíble decoración en la que la pareja se volcó para sorprender a sus invitados. Contaron con la ayuda de un gran amigo y decorador, Fernando Sanchez Herrero, quién también le diseñó el ramo
Os deseo que sigáis siendo tan felices y transmitáis esa felicidad y alegría a todos los que os rodean!
Fotógrafos: Click10
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