TERESA Y JULIEN: BODA ESTIVAL EN SALAMANCA
La historia de amor de Teresa y Julien se remonta al año 2008 cuando Teresa se marchó de Erasmus a terminar sus estudios a Rennes, en Francia.
En el campus de la universidad conoció a Julien, sin saber que años después se convertiría en su marido. Congeniaron desde el primer momento y allí empezó su noviazgo. Aunque estuvieron un tiempo separados por la distancia, en cuanto el trabajo se lo permitió se fueron a vivir juntos a París.
Desde entonces no se han separado.
Poco a poco sus proyectos salían adelante y llegó el momento de dar un paso más en su relación.
Un día que Teresa llegaba de vuelta de España, de una despedida de soltera de una amiga, se encontró el salón lleno de velas y un ramo impresionante de rosas. En ese instante Julien le pidió matrimonio y le regaló un anillo precioso.
Teresa descubrió nuestro trabajo gracias a que una amiga suya había elegido nuestro atelier de Alta Costura para que le confeccionáramos su vestido de novia.
Cuando llegó la oportunidad de buscar su vestido, pidió cita para venir a visitarnos. Quería un vestido de novia sencillo, con movimiento, elegante y que tuviera algún detalle especial y dulce que reflejará su estilo.
Su diseño lo confeccionamos en crepe de seda natural. No quería renunciar a llevar ese maravilloso tejido, pero como tiende a marcarse un poco decidimos poner un raso debajo para que le armase y no se pegase al cuerpo. De esta manera conseguíamos que luciera el precioso crepe que tanto le gustaba, con movimiento pero sin que se le ajustase . Una solución magnífica!
La idea de las flores de guipur en la manga y a lo largo del escote de la espalda aporta el toque diferenciador que Teresa deseaba. Estoy segura de que durante la ceremonia sorprendió y lució muchísimo su preciosa espalda.
La elección del ramo de Teresa fue magnífica. Es exquisita la combinación de rosas champagne y kalas. Tanto el ramo como el resto de la decoración floral de la boda fue obra de la floristería “Mayo”, en Salamanca.
Encargó en Jorge Larrañaga sus zapatos a medida. El resultado fue ideal tanto en los colores como en el diseño del zapato.
Decidieron casarse en Salamanca, ciudad natal de la novia. Querían una Iglesia pequeña y acogedora. Eligieron la Iglesia de San Pablo, que reunía todo lo que los novios querían para dar el gran paso de su vida.
La celebración posterior fue en “La Hacienda Zorita”, un lugar encantador que inundaron con su felicidad, alegría y exquisito gusto en la decoración y en los detalles.
En esta imagen podéis apreciar muy bien el tocado que hicimos a Teresa para realzar su peinado de forma original. Iba a juego con el fino cinturón que llevaba en su vestido de novia y le fue muy cómodo para sujetar el velo de tul de seda natural.
Como os comentaba antes, los detalles estaban pensados y realizados con mucho esmero y cariño.
Los recién casados disfrutaron de un viaje de novios increíble en Sri Lanka, de safari y senderismo, y en las paradisiacas playas de las islas Maldivas.
Estoy segura de que contagiaron su felicidad y simpatía por cada rincón que visitaron.
Fotos: Fotoarte Salamanca
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